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lunes, 11 de julio de 2016

Las frigorías y tu aire acondicionado

Lo primero a tener en cuenta en este tema es que no medimos en términos de frío si no en términos de calor. Entendiendo el frío como ausencia de calor o fluctuaciones en términos de calor.

La frigoría (fg) es una unidad informal de energía para medir la absorción térmica. Lo más correcto es centrarnos en términos de potencia, así la equivalencia de la frigoría es la siguiente:

1W = 0,86 fg/ hora

De esta forma sabiendo los Kw de nuestro aparato de aire acondicionado el cálculo de las frigorías es muy sencillo:

Si nuestro equipo de aire acondicionado marca en las especificaciones 3,5 Kw realizamos el siguiente cálculo:

3,5 Kw=3.500 w*0,86 fg/w= 3010 fg

En el caso de que los cálculos sean para equipos con las especificaciones en el sistema británico la equivalencia es la siguiente: 1 frigoría (fg) = 4 BTU

BTU: British Thermal Unit


Para saber cuantas frigorías debe tener nuestro equipo de aire acondicionado para cubrir las necesidades de climatización de una habitación o local existe una regla básica que es multiplicar por 100 los metros cuadrados de la misma o por 50 los metros cúbicos. Así una habitación de 20 metros cuadros necesita un equipo de 2000 frigorías. 

Esta aproximación es muy básica, se tiene que tener en cuenta el tipo de aislamiento de la habitación, la circulación de aire de la misma o ventilación y la carga térmica. Así, no es lo mismo, una habitación acristalada en un ático con luz solar directa que una habitación en un piso bajo con cobertura vegetal que impida la incidencia de luz solar dire. La carga térmica que tiene una cocina, con los electrodomésticos  en funcionamiento es mayor que la de un dormitorio sin fuentes de calor.

Aunque en términos de eficiencia o ahorro energético siempre que la habitación o local lo permitan por sus características físicas y de ubicación se pueden multiplicar los metros cuadrados por 50. 

Sin embargo, en otras ocasiones habrá incluso que multiplicar los metros cuadrados por 115 o 130, por ejemplo en una cocina o en un local con escaparate acristalado grande y luz solar directa.

Lo que nunca debe pasar es quedarnos "cortos". Un equipo de aire acondionado sin la potencia suficiente para una habitación sólo nos traerá problemas, el primero será el consumo eléctrico excesivo. La máquina de aire acondicionado trabajará sin descanso a máxima potencia intentando conseguir una temperatura que seguramente no puede alcanzar. El excesivo gasto energético no se traducirá en confort para el usuario, ya que la máquina "no llegará" a la temperatura que se desea. Por eso, es importante no tirar el dinero comprando cualquier equipo de aire acondicionado sin hacer un cálculo de nuestras necesidades.

Pásate por Trunados y te orientaremos sobre que equipo se adapta mejor a tus necesidades.